¡Sí!, es cierto que éste es uno de los grandes debates que se generan dentro de las agencias y normalmente se da entre los radicales (que defienden sobre todas las cosas la publicidad tradicional) y, los flexibilizados (que asumen posiciones intermedias y son capaces de ver grandes posibilidades en lo tradicional y las nuevas tendencias). Sin embargo, es claro que no es un tema generacional. Podemos decir que tiene que ver más con la manera como se han relacionado con el desarrollo del marketing digital y con la vida como tal.
El cambio es algo necesario para poder generar ideas nuevas, crear cambios y marcar la diferencia es un proceso que debe suceder en todo: ya sean productos, el mercado o en la manera como se hacen las cosas. Hay que arriesgar para lograr lo que se quiere, ¿verdad?. Pues bien, el marketing de contenidos es un ejemplo claro sobre esta situación, ya que siempre está en constante evolución.
Aunque es verdad que no es una práctica nueva, es un tipo de marketing que va más allá y supera todos los límites de quienes lo aplican. Uno de los plus que tiene es que se apoya en herramientas tecnológicas que permiten conocer el comportamiento de los usuarios, saber tendencias, ver más allá de las cifras y así, conectarse con los clientes potenciales a través de contenido de valor útil y relevante. Pero ojo… Siempre debemos tener presente el objetivo principal: lograr que nuestros leads se conviertan en clientes satisfechos.
La publicidad tradicional se ha tornado en contenido que interrumpe e invade al usuario. ¿No les pasa que buscan algún producto y los siguientes meses empiezan a ver contenido relacionado con esa búsqueda en todos sus canales digitales y de manera intrusiva?. ¡Olvidémonos de esto. El marketing de contenidos es todo lo contrario!. Su objetivo es acompañar al consumidor en un proceso guiado en donde podrá decidir, escoger, educarse, entretenerse y finalmente, afiliarse con la marca, nuestro propósito y los productos… Nada mejor que un cliente feliz.
Con todo esto en mente, piensa por un segundo y pregúntate: ¿debo seguir invirtiendo en publicidad tradicional o, es más efectivo generar contenidos de interés para nuestro segmento de público?. ¡Depende de tu propósito!, para estar aún más seguro, revisa la tabla que te dejamos a continuación y te invitamos a que conozcas nuestra ¨Guía para optimizar tu estrategia de marketing en 2018¨, con la que podrás comenzar a vivir ésta tendencia del marketing digital.
VARIANTE | PUBLICIDAD TRADICIONAL | MARKETING DE CONTENIDOS |
¿Qué es? | Marketing monocanal y de escasa interacción, basado en anuncios en prensa, radio o televisión con fines promocionales para atraer al cliente. Cortos, efímeros, altamente enfocados en conversión. | Creación de contenidos digitales de marca que se distribuyen en los canales y formatos en los que el cliente potencial se encuentra y, establecen una interacción cuyo objetivo es crear una relación que culmine en conversión. Amplios, permanentes y altamente enfocados en relación/conversión. |
Costos | Alto. Requiere la producción de piezas que luego deben ser colocadas en medios con espacio y tiempo limitado y por tanto costosos. | Incremental. Según la estrategia, el alcance y los objetivos planteados el marketing de contenidos es accesible tanto a los bolsillos de un emprendedor como de una multinacional. |
Segmentación | Superficial. Se entregan ofertas a personas que no han manifestado necesitarla o al menos estar interesada. La segmentación se realiza a tipos de usuarios. | Profunda. Se entregan contenidos a personas cuyos comportamientos o intereses demuestran la necesidad de consumirlo. Una vez dentro del ciclo del marketing de contenidos podemos realizar una nueva segmentación por usuario. |
Medición | Inexacta. El monitoreo es superficial y por tanto las posibilidades de modificar una campaña que no da los resultados esperado es difícil. | Exacta y a demanda. No hay que esperar a terminar una campaña para obtener resultados precisos y detallados; y lo mejor es que podemos optimizar las propuestas en pleno proceso. |
Permanencia | Escasa. Se dispone de pocos segundos para captar la atención del usuario. | Alta. El contenido de tu marca permanece mucho más tiempo en la red e incluso puede ser modificado, ampliado, ajustado y dado el caso compartido generando tráfico de calidad al sitio web en el que los usuarios pueden decidir el tiempo que desean para tener su experiencia con tu marca. |
Relación con el usuario | Agresiva. La publicidad tradicional interrumpe y se impone, a veces parece obligatoria y provoca rechazo en el usuario. | Cercana y con posibilidades de crecer. Promociona de manera discreta tus productos o marca, asignándoles un perfil de experto o líder en el área al tratar temas relacionados con el sector al que pertenece. El rechazo es fácilmente medible y subsanable. El usuario siente que tiene el poder de elegir continuar y cómo continuar sin sentir que se está perdiendo de algo importante para él. Hay una relación en la que ambos, tu marca y el usuario, participan. |
Alcance | Alto. Aunque esta variable se modifica cada año, los medios tradicionales garantizan un alcance total en el territorio colombiano. No cambia mucho si hablamos de Latinoamérica. | A demanda. El alcance de tu campaña está relacionado con tu inversión para generar tráfico. Sin embargo esta variable está marcada por la penetración de Internet en tu público objetivo. |
El mundo cambia todo el tiempo y así mismo los modelos tradicionales son quebrados y renovados. ¡Rompe paradigmas y cambia el chip!. Intenta cosas nuevas, acércate y relaciónate con tu público de otra manera, vende tus productos sin caer en los clichés… mejor dicho, abre tu mente. Verás que así vas a generar mayores resultados.
Te gustaría saber un poco más sobre la nueva tendencia derivada del marketing digital